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The Daily Audio Bible

This reading plan is provided by Brian Hardin from Daily Audio Bible.
Duration: 731 days

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Reina Valera Revisada (RVR1977)
Version
Zacarías 12-13

Liberación futura de Jerusalén

12 Profecía de la palabra de Jehová acerca de Israel. Jehová, que extiende los cielos y funda la tierra, y forma el espíritu del hombre dentro de él, dice así:

He aquí, yo voy a poner a Jerusalén por copa de vértigo para todos los pueblos de alrededor, durante el asedio contra Judá y Jerusalén.

Y en aquel día yo pondré a Jerusalén por piedra pesada para todos los pueblos; todos los que se la carguen, serán despedazados, y todas las naciones de la tierra se juntarán contra ella.

En aquel día, dice Jehová, heriré con pánico a todo caballo, y con locura al jinete; mas sobre la casa de Judá abriré mis ojos, y a todo caballo de los pueblos heriré con ceguera.

Y los capitanes de Judá dirán en su corazón: Los habitantes de Jerusalén son mi fuerza en Jehová de los ejércitos, su Dios.

En aquel día pondré a los capitanes de Judá como brasero de fuego entre leña, y como antorcha ardiendo entre gavillas; y consumirán a diestra y a siniestra a todos los pueblos alrededor; y Jerusalén será otra vez habitada en su lugar, en Jerusalén.

Y librará primero Jehová las tiendas de Judá, para que la gloria de la casa de David y del habitante de Jerusalén no se engrandezca sobre Judá.

En aquel día Jehová defenderá al morador de Jerusalén; el que entre ellos sea débil, en aquel tiempo será como David; y la casa de David como Dios, como el ángel de Jehová delante de ellos.

Y en aquel día yo procuraré destruir a todas las naciones que vengan contra Jerusalén.

10 Y derramaré sobre la casa de David, y sobre los moradores de Jerusalén, espíritu de gracia y de oración; y mirarán a mí, a quien traspasaron, y llorarán como se llora por hijo unigénito, afligiéndose por él como quien se aflige por el primogénito.

11 En aquel día habrá gran llanto en Jerusalén, como el llanto de Hadad-rimón en el valle de Meguidó.

12 Y la tierra lamentará, cada linaje aparte; los descendientes de la casa de David por sí, y sus mujeres por sí; los descendientes de la casa de Natán por sí, y sus mujeres por sí;

13 los descendientes de la casa de Leví por sí, y sus mujeres por sí; los descendientes de Simeí por sí, y sus mujeres por sí;

14 todos los otros linajes, cada uno por sí, y sus mujeres por sí.

13 En aquel tiempo habrá un manantial abierto para la casa de David y para los habitantes de Jerusalén, para la purificación del pecado y de la inmundicia.

Y en aquel día, dice Jehová de los ejércitos, quitaré de la tierra los nombres de las imágenes, y nunca más serán recordados; y también haré cortar de la tierra a los profetas y al espíritu de inmundicia.

Y acontecerá que si alguno profetiza todavía, le dirán su padre y su madre que lo engendraron: No vivirás, porque has hablado mentira en el nombre de Jehová; y su padre y su madre que lo engendraron le traspasarán mientras esté profetizando.

Y sucederá en aquel tiempo, que todos los profetas se avergonzarán de su visión cuando profeticen; ni nunca más vestirán el manto velloso para mentir.

Sino que dirán: No soy profeta; soy labrador de la tierra, pues he estado en el campo como jornalero para un amo desde mi juventud.

Y le preguntarán: ¿Qué heridas son ésas entre tus manos? Y él responderá: Con ellas fui herido en casa de mis amigos.

El pastor de Jehová es herido

Despierta, oh espada, contra mi pastor, y contra el hombre compañero mío, dice Jehová de los ejércitos. Hiere al pastor, y serán dispersadas las ovejas; y haré volver mi mano contra los pequeñitos.

Y acontecerá en toda la tierra, dice Jehová, que dos terceras partes serán cortadas en ella, y perecerán; mas la tercera quedará en ella.

Y meteré en el fuego a la tercera parte, y los fundiré como se funde la plata, y los probaré como se prueba el oro. Él invocará mi nombre, y yo le escucharé, y diré: Es mi pueblo; y él dirá: Jehová es mi Dios.

Apocalipsis 19

Alabanzas en el cielo

19 Después de esto oí como una gran voz de una gran multitud en el cielo, que decía: ¡Aleluya! La salvación, el honor, la gloria y el poder son del Señor Dios nuestro;

porque sus juicios son verdaderos y justos; pues ha juzgado a la gran ramera que corrompía a la tierra con su fornicación, y ha vengado la sangre de sus siervos de la mano de ella.

Y por segunda vez continuaron diciendo: ¡Aleluya! Y el humo de ella sube por los siglos de los siglos.

Y los veinticuatro ancianos y los cuatro seres vivientes se postraron en tierra y adoraron a Dios, que estaba sentado en el trono, y decían: ¡Amén! ¡Aleluya!

Y salió del trono una voz que decía: Alabad a nuestro Dios todos sus siervos, y los que le teméis, así pequeños como grandes.

Y oí como la voz de una gran multitud, como el estruendo de muchas aguas, y como el sonido de fuertes truenos, que decía: ¡Aleluya, porque el Señor nuestro Dios Todopoderoso ha establecido su reinado!

Las bodas del Cordero

Gocémonos y alegrémonos y démosle gloria; porque han llegado las bodas del Cordero, y su esposa se ha preparado.

Y a ella se le ha concedido vestirse de lino fino, limpio y resplandeciente; porque el lino fino es las acciones justas de los santos.

Y el ángel me dijo: Escribe: Dichosos los invitados a la cena de las bodas del Cordero. Y me dijo: Éstas son palabras verdaderas de Dios.

10 Yo me postré a sus pies para adorarle. Y él me dijo: Mira, no lo hagas; soy consiervo tuyo, y de tus hermanos que poseen el testimonio de Jesús. Adora a Dios; porque el testimonio de Jesús es el espíritu de la profecía.

El jinete del caballo blanco

11 Entonces vi el cielo abierto; y he aquí un caballo blanco, y el que lo montaba se llama Fiel y Verdadero, el cual con justicia juzga y pelea.

12 Sus ojos son como llama de fuego, y sobre su cabeza hay muchas diademas; y tiene un nombre escrito que ninguno conoce sino él mismo.

13 Está vestido de una ropa teñida en sangre; y su nombre es: EL VERBO DE DIOS.

14 Y los ejércitos celestiales, vestidos de lino finísimo, blanco y limpio, le seguían en caballos blancos.

15 De su boca sale una espada aguda, para herir con ella a las naciones, y él las pastoreará con vara de hierro; y él pisa el lagar del vino del furor y de la ira del Dios Todopoderoso.

16 Y en su vestidura y en su muslo tiene escrito este nombre: REY DE REYES Y SEÑOR DE SEÑORES.

17 Y vi a un ángel que estaba de pie en el sol, y gritó a gran voz, diciendo a todas las aves que vuelan en medio del cielo: Venid, y congregaos para la gran cena de Dios,

18 para que comáis carnes de reyes y carnes de tribunos, y carnes de valientes, carnes de caballos y de sus jinetes, y carnes de todos, libres y esclavos, pequeños y grandes.

19 Y vi a la bestia, a los reyes de la tierra y a sus ejércitos, reunidos para guerrear contra el que montaba el caballo, y contra su ejército.

20 Y la bestia fue apresada, y con ella el falso profeta que había hecho delante de ella las señales con las cuales había engañado a los que recibieron la marca de la bestia, y habían adorado su imagen. Estos dos fueron lanzados vivos dentro de un lago de fuego que arde con azufre.

21 Y los demás fueron muertos con la espada que salía de la boca del que montaba el caballo, y todas las aves se saciaron de las carnes de ellos.

Salmos 147

Alabanza por el favor de Dios hacia Jerusalén

147 Alabad a JAH,
Porque es bueno cantar salmos a nuestro Dios;
Porque él es benigno, y conviene tributarle una alabanza armoniosa.
Jehová reedifica a Jerusalén;
A los desterrados de Israel recoge.
Él sana a los quebrantados de corazón,
Y venda sus heridas.
Él cuenta el número de las estrellas;
Las llama a todas por sus nombres.
Grande es el Señor nuestro, y de mucho poder;
Y su entendimiento es infinito.
Jehová levanta a los humildes,
Y humilla a los impíos hasta la tierra.
Cantad a Jehová con alabanza,
Salmodiad con el arpa a nuestro Dios.
Él es quien cubre de nubes los cielos,
El que prepara la lluvia para la tierra,
El que hace a los montes producir hierba.
Él da a la bestia su mantenimiento,
Y a los hijos de los cuervos cuando graznan.
10 No se deleita en la fuerza del caballo,
Ni se complace en la agilidad del hombre.
11 Se complace Jehová en los que le temen,
Y en los que esperan en su misericordia.

12 Alaba a Jehová, Jerusalén;
Alaba a tu Dios, oh Sión.
13 Porque reforzó los cerrojos de tus puertas;
Bendijo a tus hijos dentro de tu recinto.
14 Él da en tu territorio la paz;
Te hace saciar con lo mejor del trigo.
15 Él envía su palabra a la tierra;
Velozmente corre su palabra.
16 Da la nieve como lana,
Y derrama la escarcha como ceniza.
17 Echa su hielo como migas de pan;
Ante su frío, ¿quién resistirá?
18 Envía su palabra, y los derrite;
Sopla su viento, y fluyen las aguas.
19 Ha manifestado sus palabras a Jacob,
Sus estatutos y sus juicios a Israel.
20 No ha hecho cosa igual con ninguna otra de las naciones;
Ni les ha dado a conocer sus juicios.
Aleluya.

Proverbios 31:1-7

Exhortación a un rey

31 Palabras de Lemuel rey de Massá; el oráculo con que le enseñó su madre.

¿Qué, hijo mío?; ¿y qué, hijo de mi vientre?
¿Y qué, hijo de mis deseos?
No des a las mujeres tu fuerza,
Ni tus caminos a lo que destruye a los reyes.
No es para los reyes, oh Lemuel, no es para los reyes beber vino,
Ni para los príncipes los licores;
No sea que bebiendo olviden la ley,
Y perviertan el derecho de todos los afligidos.
Dad el licor fuerte al desfallecido,
Y el vino a los de amargado ánimo.
Beban, y olvídense de su necesidad,
Y de su miseria no se acuerden más.

Reina Valera Revisada (RVR1977)

Texto bíblico tomado de La Santa Biblia, Reina Valera Revisada® RVR® Copyright © 2017 por HarperCollins Christian Publishing® Usado con permiso. Reservados todos los derechos en todo el mundo.